Las gerencias legales exitosas se fundamentan en varios pilares fundamentales. En primer lugar, la comunicación clara y efectiva es esencial, tanto dentro del equipo legal como con otros departamentos y partes interesadas. Además, la capacidad de adaptarse a los cambios legales y comerciales, junto con una sólida comprensión del negocio, son cruciales. La gestión proactiva de riesgos y la búsqueda continua de eficiencias también son clave para garantizar el éxito a largo plazo de cualquier departamento legal.
Un gerente legal exitoso, tiene que ser
influyente. Su voz debe ser escuchada, tanto en instancias formales como fuera de ellas, en los niveles más altos de la compañía.
Elaborar estrategias, reclutar y formar un buen equipo, al que pueda inspirar y transmitirle su energía.
La implementación de mecanismos formales de medición de desempeño, tales como los KPI, permitirán medir el aporte que hace a la empresa.
Centre su atención en temas que superen las labores cotidianas, como la gestión de crisis o la de las transacciones más negociación significativas.